05 mayo 2006

Milan Kundera (La insoportable levedad del ser)


El vértigo es algo diferente del miedo a la caída. El vértigo significa que la profundidad que se abre ante nosotros nos atrae, nos seduce, despierta en nosotros el deseo de caer, del cual nos defendemos espantados.

En el momento en que siente que el gozo se extiende por su cuerpo, Franz se estira y se diluye en el infinito de su oscuridad, él mismo se vuelve infinito. Pero cuanto mayor se vuelve un hombre en su oscuridad interior, más disminuye en su apariencia externa. Un hombre con los ojos cerrados es una ruina de hombre. A Sabina le desagradaba esa visión, no quiere mirar a Franz y por eso cierra también los ojos. Pero esa oscuridad no significa para ella el infinito, sino simplemente la disconformidad con lo que se ve, la negación de lo visto, el rechazo a ver.

Qué es la coquetería? Podría decirse que es un comportamiento que pretende poner en conocimiento de otra persona que un acercamiento sexual es posible, de tal modo que esta posibilidad no aparezca nunca como posibilidad. Dicho de otro modo: la coquetería es una promesa de coito sin garantía.

De eso se desprende que el ideal estético del acuerdo categórico con el ser es un mundo en que la mierda es negada y todos se comportan como si no existiese. Este ideal estético se llama kitsh. Es una palabra alemana que nació en medio del sentimental siglo XIX y se extendió después a todos los idiomas. Pero la frecuencia del uso dejo borroso su original sentido metafísico, es decir: el kitsh es la negación absoluta de la mierda; en sentido literal y figurado: el kitsh elimina de su punto de vista todo lo que en la existencia humana es esencialmente inaceptable.

Delante hay una mentira comprensible y tras ella reluce una verdad incomprensible.

Es un amor desinteresado: Teresa no quiere nada de Karenin. Ni siquiera le pide amor. Jamás se ha planteado los interrogantes que torturan a las parejas humanas: me ama?, ha amado a alguien más que a mí?, me ama más de lo que yo lo amo a él? Es posible que todas estas preguntas que inquieren acerca del amor, que lo miden, lo analizan, lo investigan, lo interrogan, también lo destruyan antes de que pueda germinar. Es posible que no seamos capaces de amar precisamente porque deseamos ser amados, porque queremos que el otro nos dé algo (amor), en lugar de aproximarnos a él sin exigencias y querer sólo su mera presencia.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Adoro este libro, asi que te felicito por haber elegido esas partes.

Victoria dijo...

Gracias! Yo también lo encuentro fascinante....creo que todo era digno de ser escrito acá, pero lamentablemente el tiempo no alcanza.

Claudia dijo...

Mi parte favorita es cuando ve a las chicas desnudas bailando alrededor de la piscina. Gran libro! ;)

Lector Maya dijo...

Y todavia hay una frase mas:
Marie-Claude (Personaje)agrega:
-Alli fue donde empece a dividir los libros en diurnos y nocturnos. De verdad que hay libros que solo se pueden leer por la noche-